Crec que hi ha un sector del moviment antifeixista que no mereix aquest nom, donada la seva justificació d'actes violents contra persones d'ideologia espanyolista. Ho vaig tornar a dir fa unes setmanes amb motiu del judici a sis persones acusades d'agredir a uns ultres que eren amb banderes espanyoles a un bar de Sants el 12 d'octubre de 2013. Res justifica agredir algú perquè pensa diferent.
Ara ens trobem amb un fet molt més greu. Es deté Rodrigo Lanza, acusat de la mort a Saragossa de Víctor Laínez -natural de Terrassa- que portava uns tirants amb els colors de la bandera espanyola. La jutge en base a la versió de diversos testimonis que afirmen que Lanza va ser l'agressor, ha decretat el seu l'ingrés a presó sense fiança i estima l'agravant d'odi o discrepància ideològica com a causa de l'agressió, tipificat a l'article 22.4 del Codi Penal (clica per llegir text complert de l'auto)
Lanza va ser condemnat i va estar a la presó entre 2006 i 2012 per deixar tetraplègic a un guàrdia Urbà de Barcelona, i el seu cas, presentat com un muntatge policial, va centrar part del documental Ciutat Morta, dirigit per Xavier Artigas i Xapo Ortega.
Jo mateix vaig donar veracitat -i ho mantinc- a les males pràctiques d'alguns agents de les Unitats Antidisturbis de la Guàrdia Urbana i així ho vaig publicar al meu blog i al Periódico. Però això no treu que s'hagi de condemnar la violència de persones, dites antifeixistes, contra agents de la policia o contra persones d'ideologia contraria.
Que el veí de Saragossa mort, fos membre del grup de motards Templarios, portés uns elastics amb la bandera espanyola, o simpatitzés amb algun grups d'ultradreta no justifica cap mena d'agressió física. Publico aquí el comunicat que ha fet el Movimiento contra la Intolerancia sobre aquest crim:
Movimiento contra la Intolerancia pide a los Partidos Políticos que condenen el Crimen de Odio de Zaragoza y a la ciudadanía que no vote a quien no lo condene El execrable homicidio cometido en Zaragoza que acabó con la vida de Víctor Laínez, ante el que solo cabe lamentar su fallecimiento y manifestar la condena de los hechos, pone de manifiesto una vez más que en nuestro país se cometen crímenes de odio por motivos ideológicos, mostrándose como síntoma del clima de intolerancia profunda y extrema que progresivamente se instala en nuestra sociedad, tras alentar el fanatismo y el odio en escenarios de diversos conflictos políticos en España.
Esta intolerancia criminal revela que de nuevo lo peor de nuestra historia contemporánea emerge amenazando nuestra convivencia democrática y los valores cívicos que deben presidirla, en especial los Derechos Humanos que son para todos y cuya universalidad nuestra Constitución así recoge. Vivimos un clima de intolerancia especialmente alentado desde las redes sociales que dan cobijo a los peores discursos de odio facilitados por un anonimato calculado, también por ignorancia y sobre todo por la impunidad que disfrutan sus autores.
También, de manera insensata, observamos informaciones falsas y discursos de intolerancia exacerbada en medios de comunicación y mítines políticos, realizados con ánimo de dañar la dignidad de las personas adversarias y a la verdad de los hechos, en especial con motivo de la crisis catalana, contribuyendo a un incivismo en donde crece un comportamiento que puede derivar en crímenes de odio.
Nadie puede legitimar este homicidio, ninguna ideología, ningún argumento debe facilitar que no se condene radical y absolutamente este crimen de odio. Y por ello queremos recordar hoy las palabras del Juez que condenó el asesinato de Isaac Rabin que afirmaba que “aquellas ideologías que justifican el asesinato, acaban convirtiendo el asesinato en ideología”.
Pedimos a todos los partidos políticos que condenen de forma absoluta y enérgica este crimen de odio cometido en Zaragoza y pedimos a la ciudadanía su compromiso en defensa del civismo democrático y su exigencia a los partidos políticos de reclamación de condena de este crimen de odio y de toda violencia realizada por motivos ideológicos y políticos, alentando a la ciudadanía comprometida en los procesos electorales a no votar a aquellos partidos o coaliciones que no condenen este crimen de odio y por extensión, todas las conductas delictivas basadas en la intolerancia.
Esta intolerancia criminal revela que de nuevo lo peor de nuestra historia contemporánea emerge amenazando nuestra convivencia democrática y los valores cívicos que deben presidirla, en especial los Derechos Humanos que son para todos y cuya universalidad nuestra Constitución así recoge. Vivimos un clima de intolerancia especialmente alentado desde las redes sociales que dan cobijo a los peores discursos de odio facilitados por un anonimato calculado, también por ignorancia y sobre todo por la impunidad que disfrutan sus autores.
También, de manera insensata, observamos informaciones falsas y discursos de intolerancia exacerbada en medios de comunicación y mítines políticos, realizados con ánimo de dañar la dignidad de las personas adversarias y a la verdad de los hechos, en especial con motivo de la crisis catalana, contribuyendo a un incivismo en donde crece un comportamiento que puede derivar en crímenes de odio.
Nadie puede legitimar este homicidio, ninguna ideología, ningún argumento debe facilitar que no se condene radical y absolutamente este crimen de odio. Y por ello queremos recordar hoy las palabras del Juez que condenó el asesinato de Isaac Rabin que afirmaba que “aquellas ideologías que justifican el asesinato, acaban convirtiendo el asesinato en ideología”.
Pedimos a todos los partidos políticos que condenen de forma absoluta y enérgica este crimen de odio cometido en Zaragoza y pedimos a la ciudadanía su compromiso en defensa del civismo democrático y su exigencia a los partidos políticos de reclamación de condena de este crimen de odio y de toda violencia realizada por motivos ideológicos y políticos, alentando a la ciudadanía comprometida en los procesos electorales a no votar a aquellos partidos o coaliciones que no condenen este crimen de odio y por extensión, todas las conductas delictivas basadas en la intolerancia.
Els antifeixistes son els nous feixistes. La violència crida la violència.
ResponEliminaMolt light l'article. Quan es tracta de suposats membres, de la mal dita ultra dreta, fas uns articles molt mes extensos i plens d'opinions subjectives. I podeu fer tota la demagogia que vulgueu, pero amb el temps y la veritat a la mà, no tens res a fer, el teu treball només es temporal. Temporal en un món de boixos i cap a caiguda. I com va dir Orwell: els antifexistes d'avui serán els fexistes del demà...quanta raó.
ResponEliminaHay muchos periodistas, muchos articulistas, columnistas... que son muy responsables de este clima tan guerracivilista
ResponEliminaPodría citar al menos 10 medios de comunicación que presumen de "independientes" y "objetivos", pero que tiran hacia la izquierda o la ultra-izquierda, que repiten sistemáticamente y de forma machacona, que Ciudadanos son la nueva Falange, que son un partido franquista y poco menos que la versión española del Frente Nacional de Marine Le Pen
Y la gente más joven o menos leída, claramente, les compran ese argumento
No me extraña que estos violentos anti-fascistas vean la bandera de España como algo facha, porque en Cataluña y en España, todo lo que remotamente tenga que ver con España, sea el Real Madrid o Manolo Escobar, ya es directamente fascista, franquista y de ultraderecha.
Probablemente seamos el país más progre de Europa, y al mismo tiempo, también el país con mayor incultura en temas de política, historia, cultura general, etc... El caso es que hay un muerto, y si ese muerto hubiera sido antifascista o independentista, la repercusión de su asesinato habría sido 100 veces mayor
Pero nada, que sigan insistiendo... Todo con tal de que no le llamen "facha" a uno
L'ús de la violència com a eina política és feixisme SEMPRE, vingui d'on vingui. Bravo per l'article, a contracorrent del fanatisme.
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