EL
ULTIMO GARROTE, 20 AÑOS DESPUÉS (publicat avui fa 20 anys a El País)
El 2 de marzo se cumplen 20 años de la
ejecución del anarquista Salvador Puig Antic, en Barcelona, y del polaco, Heinz
Chez (George Michael Welzel) en Tarragona. Fueron las últimas personas ajusticiadas en España por el
método del garrote vil. Tres años y medio más tarde, la compañía teatral
"Els Joglars", estrenaba una obra inspirada en la ejecución de Chez,
titulada "La Torna", expresión que significa,"aquello que se
añade para hacer el peso completo". Tras varias representaciones, Boadella
y sus Joglars fueron encarcelados y condenados en consejo de guerra por
injurias al ejército. La tesis que expresaba la obra, era que el polaco habia
sido ajusticiado para diluir la carga política de la ejecución del anarquista
catalán.
Puig Antich, había sido detenido en una
emboscada que le perpetró la policía en la calle Girona de Barcelona, el 25 de
septiembre de 1973, muriendo en el tiroteo un subinspector, si bien no se
aclaró de que arma salió la bala que le causó la muerte. Y el atentado contra
Carrero Blanco perpetrado poco después por ETA, le convirtió en la víctima
propicia para la revancha del régimen.
La ejecución causó un impacto similar al
fusilamiento del comunista Grimau, y de los agarrotamientos de los anarquistas
Delgado y Granados en 1963. Las últimas aplicaciones de la pena de muerte, se
darían en 1975 con los fusilamientos de los militantes de FRAP, Baena, García
Sanz y Sánchez Bravo, y los miembros de ETA Txiqui y Otaegui.
Al redactarse la Constitución española en
1977, el PSOE siguiendo la tradición de juristas progresistas, como Salmerón,
que dimitió como Presidente del Gobierno de la I República, al negarse a firmar
unas sentencias de muerte, o de Luís Jiménez de Asua, que consiguió, en la
Segunda República, su abolición para delitos ordinarios, se opuso al
mantenimiento de la pena capital. No obstante, la UCD consiguió que quedara la
puerta abierta a su regulación en tiempo de guerra.