diumenge, 27 de desembre del 2015

ELS ATACS AMB GANIVETS A CIUTADANS ISRAELIANS, VISTOS PER LA PERIODISTA ISRAELIANA AMIRA HASS. "No ens ataquen perquè som jueus, sinó per ser els seus ocupants, toturadors i lladres de la seva terra"

La novetat d'aquest any en el conflicte palestí israelià, més enllà de l'increment dels assentaments jueus a Jerusalem i Cisjordània que fan inviable qualsevol pla de pau o acord, ha estat els atacs espontanis amb ganivet o amb un cotxe fet per arabs israelians o palestins de Cisjordània cap a ciutadans israelians. 
Aquesta violència des de l'1 d'octubre ha costat la vida de 24 jueus israelians i de 120 palestins abatuts a terts per la policia en considerar-los els agressors, fins i tot palestins que es van veure implicats accidentalment en un accident de tràsit i se'ls va considerar terroristes amb voluntat de matar i palestins que eren al lloc dels fets i se'ls va considerar equivocadament autors d'un intent d'apunyalament.   
Aquest atacs espontanis amb ganivets es van iniciar a Jerusalem, i en tancar-se els barrirs àrabs de Jerusalem Oriental, van començar a porduir-se als assentaments jueus de Cisjordània.   
Aquest és el dignòstic dels fets i les seves causes que fa la periodista israeliana del diari Haretz, Amira Hass. Ho comparteixo plenament: 



4 comentaris:

  1. Si Israel fuese dado a los musulmanes, igualmente estos seguirían matando judíos, por la sencilla razón de que el Corán manda matar judíos. Nada, pues, tiene que ver con una supuesta ocupación de tierras de palestinos. Además, no ha habido nunca un pueblo palestino, Israel era un desierto, los judíos compraban tierras, se hicieron numerosos y convirtieron el desierto en que lo dejaron los combatientes de Alá, en un paraíso... pero sea como sea, lo dicho: es una orden de Alá el matar judíos, una orden dada en el siglo VII para todos los tiempos y lugares, cuando no había ni palestinos ni Estado de Israel.

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    1. En efecto, toda plegaria musulmana debe comenzar con la recitación del primer sura, la Fatiha (Bujari, 723), que inocula el odio a los judíos y a los cristianos (Sami ALDEEB, La Fatiha et la culture de la haine: Interprétation du 7e verset à travers les siècles, CreateSpace Independent Publishing Platform 2014). Hay unas 3150 aleyas, o sea, una buena mitad del Corán, que condenan a la reprobación a todos quienes no sean musulmanes (a lo cual hay que añadir el hecho de que, al menos 17 veces al día, al comienzo de sus rezos, el musulmán debe recitar el primer sura, la fatiha, por el cual quedará convencido de la maldad y culpabilidad de los judíos y de los cristianos… ¿En qué medida este autoadoctrinamiento puede ayudarle a amar a sus conciudadanos judíos y cristianos?). Todas ellas expresan la funesta intención de ningunearlos o de someterlos. «¡Creyentes! No toméis por amigos a los judíos y a los cristianos» (Corán 5,51); «¡Que Alá les maldiga!» (Corán 9,30; cf.: 3,151; 4,48). Este odio a los judíos y a los cristianos se expresa no sólo en el Corán, sino también en los hadices: «¡Ningún musulmán va a morir sin que Alá admita en su lugar a un judío o a un cristiano en el fuego del infierno!» (Muslim, 37,6666); «El día de la resurrección, entre los musulmanes, vendrá gente con unos pecados tan fuertes como una montaña, pero Alá les perdonará y en su lugar pondrá a los judíos y a los cristianos» (ibíd, 37, 6668). ¿Cómo negar que el antisemitismo y el anticristianismo son intrínsecos al islam? ¿Cómo es que los feroces defensores de los principios inscritos en la Declaración Universal de los Derechos Humanos no muestran más interés por el Corán? De esta mitad del Corán, en donde todos los enunciados son una denegación de toda moral —tanto de la laica como de la religiosa occidental— se pueden extraer al menos 400 aleyas que, según el Código Penal francés, son delitos muy graves de «provocación a crímenes y delitos contra las personas» cuya sanción, con arreglo a la ley del 29 de julio de 1881 sobre la prensa y la comunicación, es la prohibición de imprimir, difundir y enseñar el Corán. También en el párrafo 2 del artículo 20 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos se prevé que: «Toda apología del odio nacional, racial o religioso que constituya incitación a la discriminación, a la hostilidad o la violencia estará prohibida por la ley». ¿Por qué los mismos que pretenden que la ley en Francia sea respetada ellos mismos no lo hacen? Y algo parecido puede decirse con respecto a otros países europeos.

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  2. Vaya, vaya, el anónimo identitario ha resultado un entusiasta de Israel. Poco a poco vamos conociendo por qué tanto interés en atacar a los musulmanes.

    En estos momentos, tal como están las cosas, casi se podría decir que el jefe de la extrema derecha identitaria es Netanyahu, aunque en muchos casos hace de intermediario Putin.

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  3. Si los que llamas palestinos (musulmanes en realidad) hacen uso de la violencia contra los judíos que viven en Israel debido, según tú, a que los judíos les han quitado una tierra, les maltratan y les matan, ¿cómo se entiende que en otras partes del mundo también hay ocupaciones y los ocupados no recurren a la violencia, como es el caso del Tíbet? Los musulmanes lo único que hacen es aplicar el Corán, lo aplicaron en el siglo VII desalojando a los judíos de su tierra de Palestina matándoles, y desde entonces el odio al judío y en general a los no-musulmanes e incluso a los mismos musulmanes (por no serlo lo suficiente) no ha cesado, en obedienciencia al Corán.

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