"Vox no sabe gestionar ni los tiempos de las decisiones, ni las informaciones" me dice un histórico militante de Vox al revuelo de la noticia parcialmente desmentida de la dimisión del gerente del partido, el histórico Juan José Aizcorbe. Dimisión y desmentido con el que culminan tres días de noticias sobre la financión opaca del partido, los siete millones que Vox ha transferido a la fundación Disenso, cuyo presidente vitalicio segun sus estatutos es Santiago Abascal. Semana negra en que se ha producido la dimisión de la consejera de Vox en el gobierno extremeño, Camino Limia, la expulsión de Vox del gobierno municipal del ayuntamiento de Gijón, y la ruptura de la unidad en el parlamento valenciano entre PP y Vox, con el PP votando con los partidos de izquierda en relación a la violencia de género.
Cosas que ocurren sólo una semana después de la investidura fallida de Alberto Núñez Feijóo al que Vox regaló su voto afirmativo sin pedir entrar el el gobierno, ya que sabía que sería fallida. Sesion de investidura en la que vimos a Santiago Abascal sentado en el hemicilo junto a la nueva portavoz en el Congreso, la joven Pepa Millán, y el también joven José María Figaredo, Vicesecretario de Relaciones con las Cortes (perdón, tal vez ex vicesecretario, dado que desaparece el cargo). Una imagen muy distinta a la de antaño cuando se sentaban junto a Abascal los caídos Iván Espinosa de los Monteros, Macarena Olona y el cada vez mas postergado Javier Ortega Smith. Ortega Smith continua siendo uno de los tres vicepresidentes del partido pero ha sido excluído del nuevo Comité de Acción Política, órgano de gobierno del partido, y al que no se le vio en la sede del partido la noche electoralñ del 23 de julio. Todo es efímero en Vox y Abascal dejando la faena incómoda a Jorge Buxade e Ignacio Garriga, se desprende de lastre.
Además parece que el Vicepresidente de Acción Política, Jorge Buxadé, adquiere más poder y pasará a ser responsable de la coordinación jurídica del partido. Desaparecen 7 vicesecretarías. Marta Castro, responsable hasta ahora de cuestiones jurídicas y recursos a los tribunales junto al menguante Ortega Smith, continuará ejerciendo la assoría legal. Y cuando se oficialice que Juan José Aizcorbe deja la Gerencia. El diputado en el parlamento andaluz, Javier Cortés, asumirá parte de dichas funciones.
Ahora bien, más allá que sea sustituido prontamente por voluntad propia o por dimisión el diputado y gerente, Juan José Aizcorbe, lo que no niega Vox es el traspaso de 7 millones de euros a la fundación Disenso. Dinero en parte conseguido por las aportaciones que exige el partido a los grupos municipales y de los parlamentos autonómicos, dinero que los ayuntamientos y parlamentos autonómicos entregan a a los grupos municipales y autonómicos para su funcionamiento.
Pero lo noticiable del último informe del Tribunal de Cuentas es la advertencia por ciertas prácticas realizadas por Vox que podrían ser sancionadas, como el ingreso en cajeros automáticos de más de 20.000 euros en 2018 y 311.947 euros en 2019 declarados como producto del merchandising destinado a las “mesas de información”. A la luz de esos datos –dice el informe del Tribunal de Cuentas- “existe una incertidumbre respecto a si parte de dichos ingresos corresponden a donaciones y no a la venta de productos, lo que vulneraría lo establecido en el artículo 5.1 a) de la LOFPP [Ley Orgánica de Financiación de Partidos Políticos] al no haber sido identificados los posibles donantes"de de origen no declarado. Ingresos de 299 euros realizados por medio de cajeros automáticos que se justifican como ingresos en las mesas y carpas en concepto de merchandising. Pero se sospecharía que podrían tratarse de donaciones opacas ingresadas de forma fragmentada para no superar los 300 euros sin indicar quienes son los donantes. Algo posible en un ingreso en metálico por cajero, pero no si se hace por medio de tranferencia. Y lo que también ha generado polémica ha sido el pago de 516.670 euros en 2019 a la empresa de Kiko Méndez-Monasterio, asesor personal de Abascal, y de Gabriel Ariza, hijo del exdueño de la quebrada Intereconomía TV. Como denunciaba Macarena Olona Vox hace pagos a miembros del partdo por supuestos cursos y servicios que no se indican que deberían estar declarados mediante el llamado Modelo 347 de hacienda, conocida irónicamente como "cuenta de putas y varios".
Todo esto ocurre la misma semana que ha dimitido la consejera de Vox en el gobierno extremeño, Camino Limia, y que la alcaldesa de Gijón, de Foro Asturias, ha expulsado a los concejales de Vox del gobierno municipal. Abascal, Buxadé y Garriga confían salir de la situación actual en la que tienen por delante una legislatura en la que serían irrelevantes en el Congreso, con la repetición electoral en enero si Pedro Sánchez no consigue ser investido. Así, si Puigdemont vota en contra de la investidura al no plegarse Sánchez a todas sus demandas se repetirían elecciones de aquí tres meses. Y pese a que Vox posiblemente podría perder de nuevo escaños, un probable ascenso del PP podría dar la mayoria a la suma de PP y Vox. Y en tal caso, a diferencia de la semana pasada, Abascal exigiría la vicepresidencia y algunos ministerios para dar su sí a Feijóo.
Para responder a las informaciones publicadas estos días sobre Vox, Ignacio Garriga, como Secretario General, ha remitido esta carta a los afiliados:
